Fabada asturiana
Siendo asturiana, me encanta poder divulgar la receta que hoy vamos a preparar: una deliciosa fabada asturiana.
Es uno de los platos más tradicionales de la cocina asturiana y, según ciertos autores, está entre las diez recetas típicas de la cocina española.
Para su elaboración necesitamos alubias (en Asturias, “fabes”) e ingredientes cárnicos procedentes del cerdo como el tocino, chorizo (suele tener un porcentaje de carne de vacuno), morcilla, lacón, etc. Todos estos ingredientes cárnicos reciben el nombre de “compango”.
La variedad de alubia que se emplea para preparar una fabada asturiana es la “de la Granja”. Es suave, mantecosa y no tiene nada que ver con el “judión de la Granja”. Es importante que, a la hora de servir, las alubias estén enteras y no rotas o desechas.
Vamos con nuestra receta de fabada asturiana, una receta sencilla en cuanto a su elaboración y perfecta para los días de frío.
Ingredientes (4 personas):
- 500 g. de alubias (fabes) de granja
- 2 chorizos
- 2 morcillas
- 100 g. de lacón salado
- 200 g. de tocino
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 hoja de laurel
- Unas hebras de azafrán
Cómo se hace:
Comenzamos desalando el lacón.
24 horas antes, en un bol con agua fría, introducimos el lacón. Hasta el momento de preparar el plato, debemos cambiar el agua un par de veces.
12 horas antes, dejamos las fabas a remojo en agua fría.
Al día siguiente, escurrimos las fabas, las ponemos en una cazuela amplia y las cubrimos con agua hasta que quede dos dedos por encima.
Calentamos a fuego alto hasta que rompan a hervir (desespumando cada vez que se necesite).
A continuación, añadimos la cebolla y los ajos, ambos picados, junto con una hoja de laurel y el azafrán.
Seguidamente, añadimos el lacón desalado, el tocino, los chorizos y las morcillas.
Bajamos la temperatura y dejamos que se cocinen lentamente durante 2 horas añadiendo, en dos ocasiones, agua fría durante la cocción. Es lo que se conoce como “asustar les fabes”.
Por último, cuando hayamos comprobado que las fabas están hechas, probamos el punto de sal, rectificamos si es necesario (no añadir la sal hasta este momento) y las apartamos del fuego, dejándolas reposar durante 1 hora.
Con el caldo espesado, calentamos nuevamente las fabas y servimos.
Trucos y consejos:
- Si el caldo no queda espeso, machacar dos o tres alubias con un tenedor.
- El lacón es opcional. Si no te gusta, no lo añadas.
- Se pueden cocer las morcillas aparte durante unos minutos y añadirlas después. Así, reducimos la grasa de la fabada.
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