Rosquillas de naranja fritas
Con esta receta de rosquillas de naranja fritas, tendremos el acompañamiento perfecto para un café de media tarde. Como he comentado en alguna ocasión, las rosquillas en mi casa son una auténtica tentación. Además, en esta receta, complementaremos con un baño de chocolate para hacerlas aún más deliciosas.
Ingredientes:
- 460 g. de harina
- 100 g. de azúcar panela
- 2 huevos
- 80 ml. de leche
- 80 ml. de aceite oliva suave
- 60 ml. de naranja
- 16 g. de levadura química
- Una pizca de sal
- Ralladura de una naranja
Decoración
- Azúcar blanco (al gusto)
- 250 g. de chocolate cobertura negro
- 1 cucharadita de aceite de coco
Cómo se hace:
Empezamos tamizando en un bol la harina y la levadura. Mezclamos y reservamos.
En otro bol, batimos los huevos y el azúcar con unas varillas hasta obtener una mezcla cremosa.
A continuación, vertemos la leche, el aceite, el zumo de naranja recién exprimido, la ralladura de naranja y la pizca de sal, volviendo a batir durante un minuto más.
Cuando terminemos de batir, vamos añadiendo la mezcla de harina y levadura que teníamos reservada. Mezclamos con una espátula.
Cuando estén todos los ingredientes integrados, pasamos la masa a una mesa enharinada y amasamos hasta obtener una masa lisa (tiene que quedar una masa un poco pegajosa pero manejable).
Volvemos a meter la masa en el bol, tapamos con papel film y la introducimos en la nevera durante un mínimo de una hora. Así, conseguiremos que sea más fácil de manejar.
Pasado ese tiempo, sacamos la masa de la nevera, untamos la encimera y las manos con un poco de aceite y vamos haciendo porciones de unos 15 g. aproximadamente. A cada porción le damos forma de bola y, con los dedos, hacemos un agujero en el centro (que sea un poco grande ya que al freír se puede cerrar). Vamos colocando nuestras rosquillas en la encimera.
Cuando hayamos acabado de dar forma a todas las rosquillas, ponemos un cazo con abundante aceite vegetal a fuego medio. Una vez caliente, freímos las rosquillas dándoles vueltas hasta que cojan un bonito color dorado y estén echas por dentro. Posteriormente, las colocamos en un plato con papel absorbente.
Todavía calientes, las rebozamos en azúcar blanca y dejamos que enfríen.
Mientras tanto, ponemos el chocolate al baño maría (también se puede derretir en el microondas en tandas de 30 segundos). Una vez derretido, añades una cucharadita de aceite de coco y remueves hasta que se integre totalmente.
Finalmente, cuando estén las rosquillas frías, báñalas con el chocolate.
Trucos y consejos:
- El chocolate es opcional. Si las vas a bañar enteras no las reboces en azúcar.
- El zumo de naranja es mejor que esté recién exprimido.
- Puedes sustituir en azúcar panela por azúcar blanco o azúcar moreno.
- El aceite de coco se puede sustituir por mantequilla.
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